23 de diciembre de 2012

El bloguero, la tele y la RSE


La historia es conocida. La madre de un menor condenado en el caso “Marta del Castillo”, comparece en un programa de TV para someterse a las preguntas de los tertulianos, a cambio de dinero. Su simple aparición y supongo que sus declaraciones, generan general indignación popular. Un bloguero promueve en las redes sociales un boicot al programa de esa Televisión y a las empresas anunciantes en él. En quince días, los contratos de publicidad del programa se anulan y “La Noria”, se cae de la parrilla.

La Televisión, gravemente perjudicada por la brusca desaparición de un programa con millones de telespectadores y alta publicidad, persigue judicialmente al bloguero al que acusa de coacciones y amenazas a las empresas que se anunciaban en el programa. La “amenaza” del bloguero, era extender por las redes sociales su criterio de que debían boicotearse en el consumo los productos de dichas empresas. Afortunadamente, por lo que yo sé, la Televisión y el bloguero han resuelto amistosamente su querella, de lo cual me alegro infinito. Pero, me pregunto, ¿fue la acción del bloguero ilegal?

Estoy seguro de que ningún tribunal de un país democrático podría condenar al bloguero por lo que hizo. Es más, sostengo que ejerció un Derecho de Libertad de expresión inviolable y defiendo, que las redes sociales y toda la sociedad de la información que se está gestando con Internet, tienen que ponerse al servicio de una ciudadanía con Derecho a premiar o castigar a las marcas y a los logos comerciales, en función del comportamiento de sus empresas.

Esto no era posible antes de Internet porque la sociedad no podía ser convocada a acciones colectivas, salvo en espacios pequeños y al llamamiento de las organizaciones clásicas: Sindicatos, Partidos, Instituciones, medios de comunicación, etc. Pero en la nueva Sociedad de la Información, los ciudadanos son poderosos y la red permite convocar, sensibilizar, denunciar…y también provocar un boicot. ¿Por qué no? 

Es precisamente el temor a lesionar su imagen corporativa lo que estimula las mejores prácticas de las empresas en materia social y medioambiental. Es el temor a perjudicar la reputación social de las grandes marcas, lo que ha desarrollado en los últimos diez años, una nueva cultura empresarial que somete a las empresas y a sus marcas al veredicto ciudadano, no solo en función del precio o de la calidad de sus productos o servicios, sino en función también de sus comportamientos ecológicos y sociales y, de sus relaciones con la sociedad que les rodea.

Si una ONG denuncia las prácticas anti ecológicas o inhumanas de una empresa extractora en un país lejano ¿debe ser perseguida? Si se promueve el boicot a una gran superficie por las condiciones laborales en que operan sus cajeras, ¿es eso un delito? Si se censura a un banquero por sus cuentas fiscales en Suiza, ¿debe afectar eso a su banco? Si se demuestra el incumplimiento de condiciones laborales mínimas según OIT en las subcontrataciones de las grandes marcas europeas del textil, en el sudeste asiático, ¿es legítimo ponerse en la puerta de sus tiendas y denunciarlo a los clientes?

En los últimos dos años, se han producido graves accidentes (incendios o desmoronamientos) de naves de trabajo textil en Bangladesh. Decenas de trabajadores muertos de unas plantillas super explotadas, trabajando para las grandes marcas españolas, francesas, suecas, italianas…, que vemos todos los días en nuestras calles. ¿Tenemos derecho a reaccionar contra la irresponsabilidad de esas marcas? Acabamos de conocer que una conocida marca de supermercados, no entrega sus alimentos sobrantes al Banco de Alimentos. ¿Podemos protestar contra esa incomprensible decisión y obligarles a rectificar? Los ciudadanos, los consumidores, los medios de comunicación, las ONG’s, los líderes de opinión…los blogueros, todos podemos interactuar y conseguir comportamientos ciudadanos que premien y castiguen las acciones sociales y sostenibles de las empresas o sus irresponsabilidades, respectivamente.

Las empresas se han hecho multinacionales. Son cada vez más poderosas. Ni los Estados pueden con muchas de ellas. No olvidemos que cuando hablamos de empresas en el Siglo XXI, hablamos de emporios económicos con muchísima más influencia en sus decisiones que muchos Estados/Nación. Al respecto conviene recordar que, 3 de las 30 entidades más importantes del mundo son empresas internacionales, (por cierto, una de las que peores índices de relación laboral tienen en todo el mundo, es una cadena de Supermercados norteamericana) y, no podemos olvidar tampoco que, 30 de las 250 entidades más importantes económicamente en el mundo, son empresas. ¿Debemos renunciar los ciudadanos a condicionarlas, a estimularlas para que sean mejores? ¿Cabe pensar en la sociedad de la información en la que vivimos que la red, los blogs, los medios de comunicación, puedan permanecer ajenos a la crítica y a la movilización social respecto a las empresas y a sus logos? Es más, si así fuera, la RSE estaría herida de muerte y con ello, un poderoso instrumento para hacer sociedades más dignas laboralmente hablando, más sostenibles y más justas.

Hay límites, por supuesto. La mentira y la difamación, la guerra comercial, el honor personal, no entran en esta dialéctica. Pero, pretender privar a la ciudadanía, de su capacidad de respuesta respecto a las empresas, no solo es atemporal e ingenuo. Es sobre todo, reaccionario.

Publicado para "El Correo" 23/12/2012

22 de diciembre de 2012

Entrevista para diario deia 22/12/2012


Bilbao. 22/12/2012
Visto lo visto con el PP, ustedes se quedaron cortos tratando de recaudar.
El PP fue heredero de una campaña tan brutal, tan mentirosa, contra el gobierno anterior que cuando se encontró con la realidad tuvo que empezar a aplicar todo lo que habían negado. Y eso es lo que ha ocurrido, en el fondo llevamos un año ya no de incumplimiento, sino de mentiras muy gruesas y, sobre todo, que no vemos la salida.
¿Por qué el PSOE no quiere sacarse una foto con Amaiur en el Congreso y no tiene problemas para pactar los presupuestos con Bildu en Gipuzkoa?
En el caso de Gipuzkoa dijimos después de las elecciones que la mejor manera de gobernar Gipuzkoa era con acuerdo entre el PNV y el PSOE, el PNV se negó. En los presupuestos, hemos encontrado un acuerdo en materia de la gestión económica y en la coincidencia fiscal. Y en Madrid, donde por otra parte los escenarios son distintos, el recurso que había que interponer a la congelación de las pensiones lo queríamos hacer nosotros y podía ser malinterpretado aquel acuerdo.
Desde Euskadi se ve bastante más normal el pacto con Bildu que lo de la foto con Amaiur, lo que pasa es que a la derecha española le ha encantado, 'Pedrojota' está frotándose las manos.
Qué le vamos a hacer. Las cosas que hacemos son opinables y esa es la política, hay que admitir que hay cosas que gustan más o menos.
La salida del Gobierno vasco obliga a un mensaje renovador en el PSE. López habló de renovar personas, ideas, funcionamiento, pero él de momento no ha dicho que lo deja.
Creo que Patxi está llevando con muchísima dignidad y con una gran elegancia la cesión del poder y la gestión de su nuevo rol. Es el líder del socialismo vasco y yo creo que va a ser renovado en ese papel en el Congreso de febrero. Ahora tiene que hacer la oposición al gobierno y estar ahí dispuesto al juego que la política vasca va a dar, porque yo creo que el PSE tiene que ser la llave de la gobernabilidad en el Parlamento Vasco.
¿Considera que el PSE debe jugar un papel importante en el futuro?
Lo más importante en el socialismo vasco en este momento es darle al país la imagen de un partido que sigue siendo útil, que en la encrucijada que vive Euskadi, difícil porque tiene que reconstruir la convivencia después de ETA y hay que arreglar muchas cosas, tenemos que seguir haciendo un esfuerzo importantísimo en innovación y en competitividad, tenemos que ajustar nuestro modelo de bienestar a lo que podemos. Hay que seguir haciendo Euskadi y el PSE es un partido útil. Además, como creo que Urkullu y su gobierno van a necesitar orientar su política no a la geometría variable, sino a los pactos estables, pienso que si llaman a la puerta del PSE, éste tiene que abrirla. Creo que eso es lo mejor para el país.

7 de diciembre de 2012

La Carta Magna necesita una reforma para blindar la Sanidad como un derecho fundamental."

Entrevista para el programa Hoy por hoy de la Cadena Ser.desde Ser Vitoria.
7/12/12





La entrevista comienza a partir del minuto 6'

1 de diciembre de 2012

Entrevista -Publico- 1/12/2012

 
Lejos quedó su primera entrevista. Ramón Jáuregui (San Sebastián, Gipuzkoa, 1948) dialoga con aplomo y seguridad que le dan décadas de experiencia en la primera línea política. Incluso desvela que su partido, el PSOE, tiene previsto celebrar un "gran congreso" cerca del verano para acelerar su renovación ideológica.
 
Sólo la ideológica, insiste, porque la dirección federal actual es "la mejor" para orientar el proceso de modernización de un partido en horas bajas. El diálogo con Público, que tuvo lugar el pasado jueves en su despacho del Congreso de los Diputados, es veloz -Jáuregui afirma tener una reunión inminente- pero cargado de contenido. Quien ha sido además gobernador de Gipuzkoa, líder de los socialistas vascos, ministro de la Presidencia y diputado en el Parlamento vasco y en Europa y en Las Cortes, es ahora el elegido por el secretario general de los socialistas, Alfredo Pérez Rubalcaba, para redactar la ponencia de la conferencia política del partido.
 
¿El encargo es para usted un motivo de orgullo o cree que le han endosado un marrón?
Es un orgullo, y la mejor misión que podían encomendarme. Me parece el trabajo más urgente y más importante que tiene el PSOE entre manos. Junto a la definición de nuestro papel estratégico de jefes de la oposición y la renovación de las referencias orgánicas del partido, lo más urgente es la definición de un proyecto político renovado e ilusionante.
 
¿Tomarán alguna decisión sobre la dirección del partido?
Va a haber un gran congreso sólo de reflexión política e ideológica sin tocar nada que tenga que ver con nombres. Va a ser un congreso de ideas y no de nombres.
 
¿Qué es lo que le quita más tiempo de la organización de esa conferencia?
El trabajo de sistematización y de organización de la conferencia ya está preparado desde el mes de abril aproximadamente. Y lo he planificado en torno a doce grandes ejes de discusión. Incluyen la desafección y la crisis de la política, el sistema parlamentario, el sistema territorial, la política de inmigración, la laicidad y la aconfesionalidad en el marco de una sociedad de libertad religiosa, justicia y Estado de derecho, internet y la crisis del derecho de la información, reformas constitucionales... Así hasta doce. Hay doce grupos de trabajo compuestos por unas 300 personas que llevan coordinándose online desde el mes de septiembre cuando se celebraron las primeras reuniones. Y, probablemente, a finales de febrero del año que viene, estos grupos me entregarán sus trabajos y yo elaboraré una ponencia base que tendrá una serie de reflexiones de la España que tenemos y que queremos, y las reformas que pondremos en marcha para una España que está 35 años después de la Constitución.
 
¿Servirá todo ello para que la ciudadanía vuelva a confiar en el PSOE?
No sólo con esto. Esta es una condición necesaria pero no suficiente. Tener un proyecto y tener una definición programática reformista es imprescindible para recuperar la confianza de la ciudadanía y volver a ser el partido de la esperanza y del cambio que va a surgir como una necesidad en la sociedad española en poco tiempo, después de dos años de Gobierno del PP. Va a haber una pulsión de alternativa y de cambio a lo que está representando esta marcha atrás que el PP ha incorporado a la política española.
 
Cree que, sin dudarlo, esa alternativa será la del PSOE.
Sí. No tengo dudas. Si no lo fuéramos, dejaríamos de ser lo que somos.
 
En el Congreso Federal de febrero decidieron abrir a la ciudadanía las primarias para escoger a su candidato a la Presidencia del Gobierno. ¿Se debería permitir a todos los españoles participar en alguna otra de las decisiones de su formación?
Yo en principio soy partidario de que formalicemos la elección de nuestro candidato a las elecciones generales en primarias en un proceso bien ordenado y bien reglado que tiene que resolver la conferencia orgánica. Ese es el mandato del congreso y yo me limitaría a ese por ahora. Creo que tenemos que ir asentando la idea de las primarias, pero hay que empezar por la elección del candidato a la Presidencia del Gobierno.
 
Otro de los asuntos delicados que tendrán que abordar en la conferencia política será el del derecho a decidir. 
En la política territorial sí. Y esta va ir principalmente en concretar, explicitar y superar las confusiones que suscita la propuesta federalista. Esto va a ser objeto de consenso, en mi opinión, dentro del partido, y también creo que tendremos que descartar en esa conferencia el derecho a decidir de una parte sobre el conjunto del territorio. A priori trabajamos con la idea de que el PSOE no acepta esta visión del derecho a la autodeterminación que los nacionalistas siempre han defendido
 
¿Podrían así llegar a una postura común sobre ese asunto? Y si no es posible llegar a esa postura común, ¿cree probable mantener la cohesión interna del partido?
La mantendremos en torno a un proyecto de reforma federal del Estado vía reforma constitucional y, por tanto, una reforma relativamente profunda que permite evolucionar el Estado autonómico actual con una perspectiva federal. Va a haber un acuerdo básico también con el rechazo al derecho de autodeterminación. Puede ser que al PSC esa parte le produzca alguna discrepancia. Pero contamos con eso.
 
Parece que Catalunya, una de las comunidades autónomas más sensibles con ese tema, no ha entendido esa propuesta federalista.
Es pronto para decirlo. Pienso que en Catalunya hay base para que la propuesta sensata se abra paso. Y yo tengo la sensación de que además del resultado electoral y de la configuración del próximo Gobierno en Catalunya la idea de una vía intermedia y negociada en vías federalistas va a hacerse fuerte. Pienso que el mensaje más nítido de lo que ha pasado en las elecciones es que Catalunya tiene que reformular su relación con España con una propuesta federal.
 
¿Conseguirá el federalismo el consenso dentro del propio PSC?
La propuesta federal sí. Aunque repito que sobre el derecho de autodeterminación admito que puede haber diferencias.
 
Un pequeño grupo de militantes socialistas ha pedido disculpas a través de un vídeo. ¿Cree que el PSOE debe pedir perdón para volver a recuperar la confianza de la ciudadanía?
No. Yo creo que es un gesto innecesario. Todo el mundo sabe lo que ha ocurrido y la ciudadanía se ha expresado suficientemente. Me parece un gesto fuera de lugar que no responde exactamente a una voluntad de reconciliarse con la ciudadanía como de mostrar discrepancias con la dirección. No lo comparto.
 
Hay también quien considera que el PSOE atraviesa por una crisis de marca, pero también de producto.
Me parece que es aplicar el marketing a una cosa mucho más seria que es un partido político. Pero en general mi opinión es que la ansiedad y el nerviosismo interno no son buenos consejeros para tiempos como estos. Lo que está ocurriendo es bastante natural. Nos fuimos del Gobierno con una derrota muy importante y con una censura ciudadana a la gestión final de la crisis que tenemos que asumir. Y eso no se quita en dos meses. Lo que tenemos que hacer ahora es reconstruir nuestro proyecto para los tiempos difíciles que vivimos y ubicarnos en una oposición inteligente con una crítica sensata a lo que hace el Gobierno. Que no resulte incoherente ni espasmódica, ni extrema. Todo eso necesita una propuesta alternativa que se tiene que ir configurando. Y mi opinión es que tenemos que hacer esas cosas con calma, y las estamos haciendo. Volverán tiempos mejores porque volveremos a ser el partido de la esperanza.
 
¿Usted es de los que cree que Alfredo Pérez Rubalcaba debe mantenerse al frente del partido hasta 2016?
Yo soy de los que cree que la que tiene que hacer ese trabajo es la dirección actual elegida en el congreso hace ocho meses. Y Alfredo es el que mejor puede dirigir ese trabajo. No estamos diciendo que es lo que va a pasar en el 2016 ni en el 2015. Estamos diciendo que hay que hacer este trabajo de esta manera y con esta dirección. Y no hay nadie mejor que él para dirigirlo
.
Tal y como están las cosas, ¿se plantean la posibilidad de que haya un adelanto electoral que precipite la elección del candidato?
Puede ocurrir. Pero creo que un adelanto electoral antes de las municipales de 2015 no es probable. Ni siquiera sería razonable en estos tres años próximos porque las condiciones económicas no le van a permitir al PP plantearse ese escenario. Pero contemplar las generales coincidiendo con las municipales es una hipótesis que contemplamos y eso condicionará el calendario de las primarias del PSOE
 
Habla usted de regeneración democrática, pero movimientos como el 15-M nacieron cuando ustedes estaban en el Gobierno. Un año después, ¿está el PSOE en condiciones de liderar la recuperación de la confianza en los políticos y en los partidos tradicionales?
El 15-M ha tenido mucho sentido y legitimación, mucha fuerza de reivindicación y de cambio, más allá de que les ha faltado probablemente una agenda propositiva razonable. Pero su función la han cumplido y yo tengo mi mejor estima sobre lo que representan. Nosotros intentaremos ser quienes canalicen parte de esas protestas hacia la lógica del sistema. Lo que no queremos es incurrir en falsas soluciones y equivocarnos en el diagnóstico. Y hay veces que esos movimientos simplifican ecuaciones complejas. Por ejemplo: ¿es más democracia la democracia directa que la representativa? Objetivamente no en mi opinión. La solución no es hacer un referéndum cada semana porque eso es rutinizarlos y devaluar la democracia, por muy directa que se llame. Así podríamos poner otros ejemplos. Admito que tienen que hacerse reformas en la participación de los ciudadanos en el sistema legislativo, en la inicativa legislativa popular, en la participación...
 
Como socialista vasco, ¿qué cree que ha percibido la sociedad vasca que ha hecho mal el lehendakari Patxi López?
Sería muy fácil para mí decir que la sociedad vasca no ha sido justa con el lehendakari. En el fondo es lo que pienso pero no lo puedo decir porque creo que los electores son justos con sus decisiones. Yo creo que los componentes electorales en el País Vasco se mueven muy poco, y nosotros nunca hemos tenido una representacion mucho mayor que la que ha obtenido ahora Patxi López. En segundo lugar creo que hay un efecto coyuntural con la presencia de Bildu en el panorama político que ha recibido injustamente una prima por su compromiso con la paz. Quizás esto explica lo que ha ocurrido.
 
Sobre el escándalo de corrupción que salpica al PSC en Sabadell. ¿Cree como Pere Navarro que los imputados son inocentes?
Sí. Creo como Pere Navarro que son cuestiones muy menores y que en todo caso los compañeros son inocentes. Creo eso y estoy francamente preocupado por la dimensión exagerada que parece desprenderse de las primeras informaciones sobre el asunto.
 
Publicada en Publico, 1/12/2012